A pesar de que los lentes no tienen los vidrios -solo el armazón- y parecen de cualquiera, cuestan aproximadamente un millón y medio de dólares.
Los mismos fueron subastados por internet, en Reino Unido, por la compañía 991.
Los lentes habían sido un regalo de Lennon a un productor de televisión japonés durante una gira de los Beatles en 1966, según atestigua la carta que estaba junto a los lentes.
Los subastadores defienden el gran valor de los lentes:
“Cualquier cosa que le haya pertenecido a un ídolo es especial. Y si sabes cómo y dónde lo usó adquiere más importancia, y eso lo hace más especial para los coleccionistas”, explica John Warner, subastador.
La historia de por qué los lentes no tienen vidrios es especial ya que, cuando John Lennon fue asesinado a tiros en Nueva York, en 1980, ese hombre japonés se los quitó personalmente, forzando los lentes con sus manos, esto según su tradición, era para que el alma de John Lennon pudiese ver en el más allá”.
“Puede que Lennon no sea un Picasso, o un artista convencional, pero no cabe duda que culturalmente es un gigante y en eso, es su igual”, dice por su parte Michael Bonner, experto en música.
0 comentarios:
Publicar un comentario